Fundada por Aurelio Montero en 1953. Es la casa de comidas más antigua del casco histórico de Toledo. Toda la familia atendía el negocio, la cocina y las mesas, contando con el buen paladar del abuelo José, la receta de la perdiz “con secreto” de la abuela Paula y el tesón y buen trabajo de un muchacho de 16 años que ya sabía de negocios. A lo largo de todos estos años, la buena fama de su cocina ha acogido a muchos clientes, entre ellos, algunas importantes personalidades y muchas personas del mundo de la cultura, de la música, del cine y de la moda. Las grandes guías internacionales reseñan a nuestro restaurante como un must, un clásico de Toledo. Sesenta años después el espíritu de ese buen hacer pervive. Cocina tradicional manchega, recetas de siempre con un toque de sinceridad al estilo Aurelio. La casa, decorada de forma rústica y combinada con objetos muy diversos, parece detener su tiempo entre esas paredes enteladas con esteras extremeñas. En la actualidad, cuenta con un reservado para 10 personas y dos comedores para un total de 75 comensales. Podría ser nuestra slow food.